A finales del 2017, se informó que 214 personas murieron en accidentes automovilísticos en la ciudad de Nueva York en 2017, en comparación con las 231 en 2016. Este es el número más bajo de accidentes de tráfico jamás registrado en un año desde que se inició el registro en 1910.
En 2017, entre las 214 muertes, 101 de ellas eran peatones, en comparación con 148 en 2016. Además, entre las muertes de peatones había solo un niño en comparación con un promedio de 7 en los últimos 5 años.
Entre los cinco condados de la ciudad de Nueva York, Brooklyn fue el único distrito donde los accidentes mortales aumentaron el año pasado. Las muertes por accidentes de tráfico disminuyeron un 9% en Queens, de 65 en 2016 a 59 en 2017. Queens Boulevard, que en el pasado recibió el apodo de Boulevard de la muerte, fue progresivamente renovado y se hizo más seguro en los últimos 3 años. El año pasado, el Departamento de transporte DOT completó la tercera fase del rediseño de calles del Boulevard en Rego Park y Forest Hills. No ha habido ni una sola muerte en Queens Boulevard desde 2014.
A nivel nacional, las muertes por accidentes han aumentado en más de un 13% entre 2013 y 2016 según la Administración Nacional de Seguridad Vial (NHTSA por sus siglas en inglés). Sin embargo, el programa Vision Zero desarrollado por la administración del Alcalde Bill de Blasio ha provocado un descenso del 28% en las muertes por accidentes de tráfico en la ciudad desde 2013.
Una reducción del límite de velocidad de la ciudad a 25 mph, la reingeniería de más de 350 calles o intersecciones peligrosas (incluyendo 114 en 2017) y la instalación de cámaras de velocidad han sido algunas de las iniciativas desplegadas por la ciudad para reducir las muertes por accidentes de tráfico. Los reglamentos de tránsito también son utilizados en gran medida por Vision Zero para hacer que los conductores sean más responsables. El año pasado, 50,000 conductores recibieron una multa por no ceder el paso a peatones o ciclistas y 150,000 por exceso de velocidad. Adicionalmente, 1.2 millones de conductores recibieron un aviso de responsabilidad luego de ser detectados por una cámara automatizada conduciendo a alta velocidad.
El año pasado, los requisitos de seguridad también se actualizaron para todos los vehículos de la ciudad. Los vehículos nuevos utilizarán el frenado automático y los camiones de la ciudad estarán equipados con protecciones laterales. Además, la Comisión de Taxis y Limusinas (TLC) también desarrolló un programa para honrar a los conductores ejemplares y creó nuevas reglas para evitar la fatiga de los conductores.
Nos da gusto ver implementaciones de seguridad reflejadas positivamente en los datos y con suerte esta tendencia continuará.